Todo un clásico de la producción de Banfi, estamos en la tocana italiana donde la población de Montalcino hace gala de este espectacular y enciclopédico vino. Se obtiene a partir de las uvas Sangiovese al cien por ciento, con un trabajo muy minucioso para luego depositarlo durante unos 3 hasta 4 años en barricas de roble francés. Se trata de un ejemplo de la perfecta síntesis entre tradición y modernidad en el mundo de la enología.
Toda la zona de la finca vinícola se caracteriza por muy soleada y ventosa, con precipitaciones que se concentran fundamentalmente en el periodo otoñal. Se trata de un clima suave que, gracias a las fuertes variaciones térmicas que se producen entre el día y la noche, permite a las uvas madurar de manera óptima. La estructura de los suelos es extremadamente rica y heterogénea. La presencia de arcilla y de calcio favorece el crecimiento óptimo de las vides y la complejidad de los vinos tintos.
A la vista se presenta intacto, con un rojo rubí intenso con reflejos granates bien delineados, de moviemento algo denso. A la nariz ofrece una gama floral muy atractiva como violetas y lavanda, luego aparece la vainilla el chocolate y las especias secas aromáticas. Al paladar resutla elegante y potente, resulta agradable desde un principio, al tiempo que se adapta a un larguísimo envejecimiento, complejidad inmejorable.